- Las dos últimas semanas han sido una maravillosa locura.
- Primero fue Martos, visitamos sus colegios, sus plazas y su maravillosa biblioteca. Nos embebimos de su gente y regresamos con el olor y el sabor a oliva impregnados en nosotras. Un maravilloso viaje que continuará.
- Después, Cuenca nos recibió con sol, seguido de una lluvia incesante y caprichosa que nos ha calado hondo. Seguimos en el trayecto final.